El Premio Cervantes siempre tiene una cara amarga: se le da a autores mayores y siempre con ese miedo a que no se llegue a tiempo, pues los nominados, decimos, son de edad avanzada… Es normal, pues el galardón se otorga por el trabajo de toda una vida y no por una obra determinada. Este año 2012 se lo ha llevado un poeta de la llamada Generación del 50, Generación del medio siglo o también de “los niños de la guerra”. A ella pertenecen poetas tan heterogéneos como Antonio Gamoneda, Ángel González o el llamado Grupo de Barcelona, que incluía a poetas como Gil de Biedma, Gabriel Ferrater, José Agustí Goytisolo o el versátil Carlos Barral (quien después dirigiría la mítica editorial Seix-Barral) y a críticos literarios como Castellet.
Podéis leer la noticia del premio, por ejemplo, aquí.
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